El 25 de abril de 2023, la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen de una iniciativa de reforma que cambia los seis días laborables por cinco y aumenta de uno a dos los días de descanso.

De acuerdo con expertos consultados por Reforma, la propuesta para reducir la jornada laboral de los empleados generaría una mayor carga fiscal para los patrones.

La propuesta será benéfica para los trabajadores en el sentido de que disminuirán los días de trabajo, para los patrones implicará una mayor carga en materia fiscal. Esto se debe a que por un lado, recurrirán a contratar a más personal para no afectar su nivel de producción, lo que conlleva retener más impuestos, específicamente el Impuesto Sobre la Renta (ISR).

La reforma traerá retenciones adicionales, pago de cuotas patronales mayores, y eso significa una mayor carga. La retención de impuestos y la carga administrativa será mayor, y eso finalmente tendrá un impacto en los costos de las empresas.

“Para mantener niveles de producción iguales, seguramente las empresas van a tener que contratar a más personal y la existencia de mayor personal va a implicar un mayor pago de impuestos sobre nómina, de retención del Impuesto Sobre la Renta.

“Los costos fiscales que se absorberán también a nivel cuotas patronales y seguridad social”, comentó.

Se estima que la iniciativa de reforma sea discutida por los legisladores en el próximo periodo ordinario, que iniciará en septiembre.

Con la propuesta se busca reformar el Artículo 123, fracción IV del Apartado A, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM).

Actualmente, la fracción mencionada establece que por cada seis días de trabajo, el trabajador deberá disfrutar de un día de descanso, cuando menos. La reforma cambia los seis días laborables por cinco y aumenta de uno a dos los días de descanso.