Para tratar de combatir la simulación de operaciones, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) puede solicitar a los contribuyentes que demuestren la ‘materialidad’, entre otros requisitos.

El término de ‘materialidad’ no existe en la legislación fiscal. Pero de acuerdo con la definición financiera, la materialidad es toda evidencia que pueda demostrar la existencia de una operación.

Por eso, es importante que los contribuyentes mantengan sus registros contables y documentos en orden, de manera que puedan demostrar la veracidad y legitimidad de sus operaciones.

1. Justificación

Los contribuyentes necesitan toda la información que justifique la indispensabilidad. Es decir, lo estrictamente indispensable o lo pertinente de la contratación del producto.

El contribuyente puede pensar que la indispensabilidad sólo es requisito para las deducciones, pero también lo puede pedir la autoridad para acreditar la materialidad de las operaciones.

Por eso, necesitan tener toda la justificación, la indispensabilidad, la necesidad o la pertinencia de por qué contrató a cada proveedor.

2. Origen

Deben tener información de cada proveedor: quién es, cuál es su portal de internet, cuántos años tiene en el mercado, etcétera.

Pero también es importante el tema del origen de la contratación: cómo se contactó, cómo llegó a la empresa o cómo nació la relación de negocios.

3. Ofrecimiento

La oferta o el ofrecimiento también es importante: qué ofreció, qué productos, qué servicios, a qué precios, cómo los vende, qué se necesita del proveedor, etcétera.

Esto hay que plasmarlo en diagramas de flujo de procesos, para que la autoridad lo entienda. Porque muchas veces se entrega como si fuera una tesis y el fisco no lo entiende. Entonces empezamos a hacer flujos de los procesos del negocio.

4. Negociación

Los contribuyentes también necesitan documentación para acreditar qué se negoció con el proveedor. La cantidad de documentación la decide el contribuyente, porque es quien debe acreditar la materialidad, no la autoridad.

Lo anterior se debe a que el contribuyente es quien quiere hacer la deducción, y la autoridad es quien fiscaliza.

5. Formalización

Otras evidencias importantes, son los documentos formales: los contratos, las órdenes de compra, los Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI), entre otros.

6. Supervisión

También se recomienda guardar la documentación relacionada con el tema de la supervisión: las bitácoras de servicio, hojas de supervisión de trabajo realizado, de acuerdo con los contratos, por fecha, por hora, por nombre, por proyecto, etcétera.

7. Resultados

Si no hay resultados ‘cacareados’ no hay materialidad. Ningún empresario exitoso paga por algo que no obtiene o recibe. Por eso, es importante decirle a la autoridad lo que se obtuvo con la contratación. Además, qué valor agregado generó, qué rentabilidad o qué potencialidad de obtener ganancias.

Nadie realiza operaciones para perder dinero. Los empresarios pueden llegar a perder, pero ninguno hace negocios para perder.